miércoles, 11 de noviembre de 2015

La pobreza como estrategia de vida.




En Colombia, así como en muchos otros países latinoamericanos, ser pobre ha sobrepasado la barrera de condición social y se ha convertido en un estrategia de vida. Esto se debe, principalmente, a que nuestros gobiernos han adoptados mecanismos que en lugar de erradicarla, la fomentan indirectamente. Algunos ejemplos son el Sistema de Identificación y Clasificación de Potenciales Beneficiarios para programas sociales (Sisben) y los fantásticos subsidios subsidios de familia y vivienda.
Lo que estas "estrategias" hacen, es prestarle ayudas a las personas pertenecientes a los estratos I y II. Estas, suelen ser mesadas que rondan los 150 dólares. Por supuesto, si te dan a elegir entre trabajar por 250 o no hacer nada por 150, ¿qué prefieres? Claro, existe otra cara en la moneda y es que hay personas que utilizan estas ayudas temporalmente y las toman, más que como un sustento, como una herramienta de impulso primario. O eso es lo que muestran -al menos en Colombia- los comerciales gubernamentales.

Claro, que según estos mismo los indices de pobreza absoluta han disminuido dramáticamente en menos de cinco años, gracias a estas estrategias. Pero, ¿cuántas de las personas que con estos subsidios salen de la pobreza absoluta alcanzan un nivel de vida estable?





Por otro lado, está el sisben, que presta un servicio de salud a las personas de escasos recursos. Este seguro social, si bien es muy deficiente, cuenta con millones de usuarios a nivel nacional y muchos de ellos son personas asalariadas que deciden "ahorrarse" el gasto que significa la salud fingiendo ante el gobierno ser pobres para recibir gratuitamente este servicio. Y si bien esto es un acto reprochable por parte de los ciudadanos, este comportamiento está impulsado por otras acciones tomadas por el gobierno, ya que las personas pertenecientes al sisben tienen acceso a beneficios como reducciones en el pago de servicios públicos e impuestos, becas de educación superior, etc.

¿Qué ha hecho el gobierno, para prevenir y contrarrestar estas acciones? Visiblemente, nada. Y si lo han intentado, ha sido vagamente y sólo con la intención de un arreglo superficial. La lucha contra la pobreza se ha abandonado cuando por que cree ganada, pero en realidad estas ayudas no representan un arreglo al problema pues se le resta importancia lo más primordial; la educación de calidad.

Gracias a estas "ayudas gubernamentales" ser pobre es -en algunos casos- más fácil incluso que pertenecer a la clase obrera y por esto, cada vez más personas renuncian a la posibilidad de trabajar para esperar "lo que les toque". ¿Qué le ha sucedido a nuestra mentalidad, que empezamos a preferir las cosas (por muy insuficientes que sean) "regaladas", que las cosas que podemos ganar por medio de nuestro trabajo?

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